El Museo y sus propósitos de año nuevo [1]
Enero es por excelencia el mes de los buenos propósitos; la hora de hacer balance o directamente “barrida y mesa limpia” y pensar en nuevos objetivos a alcanzar. Quienes trabajamos en el Museo nos ponemos en su piel de piedra y madera e intentamos imaginar qué pediría al 2018 este sólido Pabellón si pudiera hablar.
Suponemos que sobre todo le gustaría seguir estando acompañado de la gente; porque los espacios, aunque pueda parecer una afirmación poética alejada de la comprobación científica, cobran el sentido, la personalidad, y el alma de quiénes los habitan. Si queremos que este Pabellón de Perú, sede del Museo Casa de la Ciencia del CSIC, siga siendo percibido por la gente como un apetecible espacio de encuentro con el conocimiento, de integración, de divulgación científica amena, cálida y de calidad, debemos trabajar para ser cada días más atractivos para vosotr@s, nuestro público.
Esta fidelización –como dirían los expertos en marketing- estamos convencidos se logra a través de dos vías; en primer lugar ofreciendo cada vez contenidos de mayor calidad, con un alto nivel de interactividad, y por otra parte, con espacios más confortables, adaptados y universales. Justamente en esas dos vías estamos trabajando y deseamos en este 2018 seguir avanzando en estos objetivos.
Sabemos que somos un Museo joven y modesto, que no simple, nacido en tiempos de austeridad y obligación de un gasto público responsable; pero intentamos suplir la liquidez con imaginación. Precisamente, echando mano de la imaginación, no sólo nuestra, sino de muchos de vosotros, hemos puesto en marcha el pasado año un proyecto cooperativo para reunir el mayor número de ideas que nos permitan rehabilitar nuestros espacios exteriores: Ciencia al Descubierto. Un cierre estupendo de este 2018 que ahora comienza sería precisamente que se empezaran a ver los primeros brotes materiales de este proyecto, y contar así con unos jardines que sean una auténtica prolongación del espíritu del Museo.
Por supuesto, aunque sabemos que quizás no podemos llegar a los niveles de espectacularidad de los grandes museos científicos del mundo, pretendemos en este 2018 subir más peldaños en la escalera de la calidad. Muchos de vosotros que nos seguís desde nuestros inicios habéis visto los avances que hemos ido realizando, y el compromiso es seguir en el camino ascendente. Sólo os pedimos que nos sigáis acompañando, apoyando, dándonos ánimos y, por qué no, también algún tirón de oreja si hace falta. Hablamos dentro de doce meses.
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